Puedes llorar porque se ha ido, o puedes sonreír porque ha vivido. Puedes cerrar los ojos y rezar para que vuelva o puedes abrirlos y ver todo lo que ha dejado; tu corazón puede estar vacío porque no lo puedes ver, o puede estar lleno del amor que compartisteis. Puedes llorar, cerrar tu mente, sentir el vacío y dar la espalda, o puedes hacer lo que a ella le gustaría: sonreír, abrir los ojos, amar y seguir.
Estimada familia les acompaño en su dolor. En estos momentos de angustia busquen apoyo en Jehova. Salmos 34:18 dice que Él está con quienes tienen el corazón destrozado.
Nuestro Dios nos ha prometido despertar a nuestros seres queridos que hoy descansan en el sueño eterno (Hechos 24:15).
Nos ha prometido terminar con nuestro dolor y la muerte (Apocalipsis 21:4).
Tengan la esperanza de que así será. Mientras ese día llega, sigan buscando apoyo en Jehova.
Reciban mi abrazo fraterno desde Chile.